La Desinsectación es una técnica de saneamiento que tiene como finalidad el control de insectos rastreros y voladores que perjudican la salud y afectan la calidad de vida del hombre.

Cada plaga debe ser tratada de manera particular según sus características.

Existe una gran variedad de técnicas de aplicación, dependen de la superficie de las zonas a tratar, de la dificultad de acceso, o si la desinsectación se efectuará en lugares al aire libre o cerrados.

Diferentes métodos de Desinsectación.

Pulverización

Es una de las técnicas más utilizadas y consiste en la aplicación de insecticidas de alto poder de volteo y acción residual prolongada, diluidos en solución acuosa. Los productos eliminan por contacto, ingestión y aspiración.

Se utilizan pulverizadores manuales con los que se consigue un pulverizado muy fino.

El sistema de rociado consigue una profunda penetración en rincones y grietas, asegurando el contacto directo con los insectos. No afecta las superficies tratadas y su rango de toxicidad para el hombre es prácticamente nulo.

Los productos se presentan en forma de líquidos emulsionables o polvos solubles. El producto se elegirá en base a las características de la plaga a tratar y al grado de residualidad que se desea obtener.

Gel Insecticida Dosificable

El gel insecticida es un cebo que por su composición atrae a las cucarachas que lo buscan e ingieren hasta producirles la muerte. Se coloca cerca de los lugares de tránsito de los insectos.

Este producto posee las siguientes características:

  • Se aplica mediante una pistola dosificadora, en áreas a las que es difícil acceder por los métodos comunes.
  • Es imposible que se produzca una intoxicación si lo utiliza personal idóneo.
  • No moja, no mancha ni tiene olor, por lo tanto se puede colocar en las alacenas, escritorios, archivos, etc; sin desocuparlos.

Es ideal para ser utilizado en enchufes, electrodomésticos, equipos eléctricos y en lugares inaccesibles para los líquidos.

Es lo más recomendable para aplicar en lugares cuyos propietarios padecen de problemas de alergia y en zonas de alto riesgo como hospitales, geriátricos, comedores escolares, etc.

Se le calcula una efectividad aproximada de un mes y medio a partir de su aplicación.

Aerosoles de liberación continua:

Se los llama también aerosoles de descarga total; se utilizan en ambientes cerrados para controlar problemas provocados por diferentes tipos de insectos (cucarachas, moscas, arañas, etc). El aerosol libera una nube de insecticida que satura el ambiente, produciendo la muerte inmediata de los insectos debido a su gran poder de volteo y poderosa capacidad de expurgue. No deja residuos ni olor sobre la superficie tratada.

La cantidad de aerosoles a utilizar dependerá del tamaño del lugar a desinsectar.

Nebulización en frio

Consiste en una llovizna fría que cubre toda la superficie afectada. Se aplica con máquinas eléctricas que fragmentan el líquido plaguicida en gotas de hasta 30 micrones, permitiendo así que el insecticida permanezca más tiempo en el aire. Las gotas continúan flotando aproximadamente 2 horas y se adhieren a las cerdas de los insectos, donde se acumulan para posteriormente introducirse en su cuerpo y causarles la muerte.

Esta técnica se aconseja para espacios cerrados con alto grado de infestación y también en espacios abiertos para el control de moscas y mosquitos.

Debido al pequeño tamaño de las gotas y la presión con la que son desiminadas en el ambiente, tiene la ventaja de penetrar en zonas donde el pulverizado común no llega.